La morosidad del crédito concedido por bancos, cajas, cooperativas y financieras alcanzó el pasado mes de noviembre el 7,5%, con lo que ya está a solo un punto y medio de su máximo histórico, el 9,1%, marcado en febrero de 1994. Durante los 11 primeros meses de 2011, entraron en mora créditos por 27.000 millones de euros, frente a los 11.350 registrados en el mismo periodo del ejercicio anterior (+137%).
Según los datos provisionales de noviembre que facilitó ayer el Banco de España, la tasa de impagados correspondiente a ese mes recuperó cotas que no alcanzaba desde hace 17 años, desde noviembre de 1994.
El incremento de la cartera de créditos dudosos ha sido imparable, hasta cifrarse a finales del pasado mes de noviembre en 134.000 millones de euros. También el incesante crecimiento del desempleo y la ruina económica que sufren miles de familias españolas contribuye a que los impagos aumenten sin cesar.