Los honorarios de las firmas y el tiempo que éstas tardan son inconvenientes importantes para nueve de cada diez compañías al externalizar los asuntos legales. Calidad del servicio y experiencia, lo más valorado.
Las asesorías jurídicas de las empresas cada vez exigen más a sus proveedores externos de servicios legales. Estos departamentos internos se han profesionalizado mucho en los últimos años y, además, la actual coyuntura económica ha hecho que los costes en las compañías se reduzcan y se busque calidad al menor precio posible. Al 96% de los asesores legales internos le parece un inconveniente importante los honorarios a la hora de externalizar servicios jurídicos. Así lo manifiesta el Observatorio Legal de la empresa en España, cuyas conclusiones adelanta hoy EXPANSIÓN, elaborado tras consultar a 202 compañías, y que fue presentado anoche en el Colegio de Abogados de Madrid (Icam).
El dato que se desprende del informe en torno al inconveniente de los honorarios al contratar bufetes viene a respaldar lo que el sector ha estado viviendo en los últimos ejercicios: una guerra de precios sin cuartel entre los despachos y unos descuentos inimaginables en otras épocas con porcentajes de reducción superiores al 50% y al 60%, y en algunos casos concretos, incluso superiores.